Sin embargo, no podemos concebirla únicamente como la capacidad mental para fijar nuestra mirada en un solo punto de la realidad. La atención selectiva, en principio, nos ayuda a focalizar y tomar conciencia de un único aspecto en un escenario global. El problema de este proceso es que es posible que perdamos detalles de otros sucesos que estén teniendo lugar a la vez.
En otras palabras, el mismo proceso que nos hace concentrarnos nos descentra de otras partes de la realidad, ya que en el fondo la atención selectiva funciona como un filtro cognitivo para nuestro cerebro.
*Ejemplo, Desafío visual que prueban que eres incapaz de concentrarte:
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Por: Créditos al final del vídeo.
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